Lo bueno del marketing es conocido, ayuda a vender mucho más, lo que sea. Lo malo, la tentación del engaño.
Muchas veces hasta los gerentes de marketing se convencen
de sus historias ficcionales.
Voy a citar solo un ejemplo. De la cervecería industrial
argentina.
En 2018, la marca Andes (creada por Quilmes en 1921),
decide lanzar Andes Origen.
Y en 2021 la cerveza Salta (creada en 1958, hoy de CCU)
comienza a producirse en Santa Fe, y ese mismo año la empresa lanza Salta
Cautiva.
La idea es “gurmetizar” o "glamorizar" la tradición, por el temor a que lo
antiguo quede solo como un recuerdo popular, y pensando en que lo popular es sinónimo
de baja calidad, algo falso, pero apuestan a lo seguro y justifican así los
salarios de los gerentes de los departamentos de marketing y publicidad.
Para esto deciden una bajada de línea afirmando que las “nuevas”
marcas no tienen nada que ver con el pasado. Y la verdad es que sí, es un
relanzamiento, (o un relanza miento). Como avergonzándose de la historia, importándole
poco y nada esta. Muchachos, sean honestos, comenzaron a vender “terroir” el
origen, el agua, la esencia, y de esto solo les quedó el nombre, la marca, la
cerveza Salta que se vende en Buenos Aires está elaborada en Santa Fe. La Salta
Cautiva en plantas de Buenos Aires o el caso de Cautiva Negra elaborada por La Yungere (Rabieta) en Pilar para la cervecería de la calle Guemes en Salta.
Respecto a Andes, también, de origen solo el nombre. De
Andes no tienen ni el agua, y sabemos que la cerveza tiene más del 90% de este
elemento.
Pero el caso es ejemplar, ya que creo ni los propios
ejecutivos de CCU, ni muchos menos los de Quilmes, se imaginaron el valor que
tenía la marca Imperial, así tal cual estaba, y estaba abandonada.
Hoy CCU apuesta, o al menos están atentos, a otras marcas
del pasado que estaban en el baúl de los recuerdos, caso Palermo o Bieckert.
Que la historia no se manche, y muchos menos con cerveza.
Salud
Sebastián Bossi https://www.youtube.com/watch?v=05AKbEts0I0