Cinzano 1757, apareció
el primo rico del popular vermut
¡Por fin!
Algo que al
menos yo lo estaba esperando desde que estamos aislados del mundo de las buenas bebidas.
Un producto que no es importado pero tiene una calidad
internacional.
Las diferencias son
importantes.
1-
Su base no
es un vino oxidado como en toda la producción de vermut local. No tiene notas
de oxidación, de debilidad.
2-
En boca posee un equilibrio único en su categoría,
el amargor, el dulzor y la base alcohólica se ensamblan de manera casi
perfecta.
3-
Perdura más en boca, de manera franca, tal cual
lo prometido en nariz y en boca.
4-
El precio es muy accesible, y su relación precio
calidad es insuperable, 62 pesos el litro, contra 42 de la versión estándar.
5-
La única contra es su distribución, me fue casi
imposible conseguirlo, lo conseguí recién meses después de su presentación
oficial, y la botella estaba algo perdida en una vinoteca, ni el dueño
recordaba que la vendía, no sabía ni el precio. Si pensamos el precio de un
fernet, o de un bitter, que es similar al de este vermut Premium, la distribución
tendría que ser similar.
6-
La botella esta ok, al igual que la etiqueta,
pero tuve problemas con la apertura de la rosca, un problema que existe en la
industria argentina desde hace 40 años, desde el origen mismo de la tapa a
rosca en el país, es hora de una mejora, la plata no es una excusa, inviertan.
Me encanto el producto.
Esperemos que no se cumpla la máxima argentina, toda propuesta de excelencia, dura
poco, y en este caso empezamos mal, casi no se encuentra disponible...
El producto me encanto, está claro, pero si no lo consigo de manera fácil y continua, el producto es un fracaso.
El producto me encanto, está claro, pero si no lo consigo de manera fácil y continua, el producto es un fracaso.
Espero que este no sea
uno más.
¡Salud!
Sebastián Bossi