Descargo mi opinión sobre un instituto terciario (Escuela de hotelería, no
de vinos) donde trabaje dos años y finalmente la directora me deja sin
trabajo por un tema, considero, personal. Este instituto de hotelería,
terciario no universitario, que exige asistir de saco y corbata para luego permitirle
a los alumnos copiarse y hasta aprobarlos sin haber asistido a los exámenes o
haber fallado en estos. O por ejemplo llamar de la dirección por teléfono al
profesor y obligarle a aprobar a todos. Entre otras desprolijidades. Toda
responsabilidad de la directora.
En diciembre de 2015. Luego de una discusión política, en privado en su escritorio, me dice, búscate trabajo porque no tendras cursos en 2016, no te estoy echando eh... Volves en Agosto. Es agosto y no volví, no me llamaron, no me aclararon absolutamente nada. Por respeto a mis alumnos que fueron muchos en esa institución, aclaro por este medio mi posición. No soy de buscar dinero por maltrato laboral, pero si me gustaría aclararlo y creo que esta es una manera valida. El dueño del lugar prometió bancarme y no cumplió. Por lo que lo considero también responsable de lo que sucede. Esta señora le hace mucho daño a la educación.
En diciembre de 2015. Luego de una discusión política, en privado en su escritorio, me dice, búscate trabajo porque no tendras cursos en 2016, no te estoy echando eh... Volves en Agosto. Es agosto y no volví, no me llamaron, no me aclararon absolutamente nada. Por respeto a mis alumnos que fueron muchos en esa institución, aclaro por este medio mi posición. No soy de buscar dinero por maltrato laboral, pero si me gustaría aclararlo y creo que esta es una manera valida. El dueño del lugar prometió bancarme y no cumplió. Por lo que lo considero también responsable de lo que sucede. Esta señora le hace mucho daño a la educación.
Simplemente quería explicarles a mis alumnos porque de un día para el
otro, y sin aclaraciones de ningún tipo, Me echaron cobarde y silenciosamente.
Luego de haber cumplido con mí trabajo durante dos años sin haber faltado un
solo día, llegado siempre puntual y haber sido tan exigente y profesional como corresponde
a un nivel terciario, ni más, ni menos.