La Razon 25 de julio de 2010

WHISKY
El clásico que seduce nuevos paladares
El "escocés" siempre fue visto como un trago con demasiado carácter. Pero con la nueva coctelería, sumó más adeptos.

Palabra de especialista:
Sebastián Bossi, Asociación Argentina de Sommeliers.

Un trago para los mejores momentos.
Cuando hablamos de whisky en general hablamos del Blend Scotch
...Whisky: el whisky escocés de mezcla, que representa más del 90% de
la producción de Escocia y más del 0% del consumo mundial. Esta popularidad tiene que ver con que son más fáciles de tomar y en cualquier ocasión pues son mezclas (blends) de whiskies de distintos cereales, algunos de sabor más fuerte (los single malt) y otros más suaves. Sugiero consumir los blends con bastante hielo y un poco de agua o soda. Así se disfruta mucho de ese sabor tan particular y el alcohol se hace menos perceptible. O bien, colocar en un vaso de trago largo un poco de hielo, una cuarta parte de whisky blend o whisky Bourbon, y completar con Ginger Ale, decorado con piel de limón o naranja. Pero cuando hablamos de un blend muy añejo (más de 12 o 18 años) o de algún single malt o pure malt, sugiero disfrutarlo solo con un poco de agua sin gas, en una pequeña copa de cristal o con un solo hielo
en el clásico vaso old fashion. Como sommelier, recomiendo acompañar al whisky con los mejores momentos de la vida, pero no tanto con la gastronomía: el ahumado tan característico no va muy bien
como muchas veces se piensa con las comidas ahumadas, y mucho
menos con un buen puro, a menos que sea, en este último caso, acompañado por un cóctel con base de whisky Bourbon, como el Old Fashioned o el Manhattan elaborado con este whisky.
Resumiendo, un blend escocés o un whisky irlandés o un whisky americano, es bienvenido para cualquier hora y ocasión y los Single malt, para ocasiones más especiales; donde podamos disfrutar de esos sabores repletos de sabiduría y misterio.